Este artículo fue escrito pòr Sam shoemaker, el cual era el pastor al cargo de la iglesia del Calvario de NY en la cual se radicaban los Grupos Oxford a los que pertenecía Bill W. Aparece varias veces en la literatura de A.A. y Bill le muestra su agradecimiento señalandole como una de las personas más importantes en el nacimiento de A.A.
Por Sam Shoemaker * (from the Oxford Group)
Permanezco apoyado en la puerta. Ni voy demasiado lejos para dentro , ni permanezco demasiado lejos hacia fuera. La puerta es la puerta más importante en el mundo - esto es, la puerta que los hombres cruzan cuando encuentran a Dios. De nada vale que yo la haya atravesado y esté dentro cuando tantos y tantos están aun fuera, y como yo, ansian saber donde está la puerta. Y todo lo que alguna vez encuentran es sólo la pared donde la puerta debiera estar. Ellos se arrastran a lo largo de la pared como ciegos, tentando con las manos , sabiendo que debe haber una puerta, aunque nunca la encuentran. Entonces yo me apoyo en la puerta.
Lo más imortante en el mundo para un hombre es encontrar esa puerta- la puerta de Dios. Lo más importante que un hombre puede hacer en este mundo es tomar una de esas manos que andan a tientas y ponerla sobre el pestillo de la puerta, que él solo puede abrir. Los hombres mueren fuera de la puerta, como mendigos hambrientos mueren en las noches frías de las ciudades durante el cruel invierno. Mueren por falta de lo que está a su alcance. Ellos viven en el otro lado de ella - porque no la han encontrado. Nada importa más que a ayudarles a encontrarla, y a abrirla, y entrar, y encontrarle a EL. Así que yo permanezco en la puerta.
Han estado en las cavernas, y ahora van hacia un espacioso ático. En una vasta casa con muchas habitaciones, esta casa es la casa de Dios. Entra en lo mas profundo de lo oculto, del silencio, de la santidad. Algunos deben ir a esas habitaciones interiores y conocer el tamaño, profundidad y altura de Dios, y llamar al resto de los que estan fuera y contarnos como de maravilloso es. Algunas veces echo un vistazo más pronfundo dentro, pero mi sitio esta al lado de la puerta, por eso permanezco cerca de ella.
Hay otra razón por la que permanezco alli. Algunas personas entran y se asustan de Dios. Esta gente siente claustrofobia cósmica, y quieren salir,. " déjenme irme " ellos lloran. Y la gente de dentro lo único que hacen es aterrorizarlas aun más. Alguno tiene que quedarse a la puerta para decirles que se están echando a perder. De la vieja vida, ellos ya han visto demasiado. Nadie sino Dios va a poder hacer nada por ellos. Alguien tiene que estar mirando en la puerta para decirles que se está mucho mejor dentro.Alguno tiene que estar mirando por estos que han entrado y estan deseando salir pitando. Por eso permanezco al lado de la puerta.
Admiro a la gente que entra, pero desearia que no olvidaran como eran las cosas antes de que entraran. Entonces seran capaces de ayudar a la gente que todavía no han encontrado la puerta.
O la gente que quiere escapar corriendo de Dios. Tu puedes ir muy alla dentro , y estar mucho tiempo , y olvidar a la gente de fuera. Por lo que a mi se refiere estaré en mi viejo lugar de costumbre, esto es, suficientemente cercano a Dios como para escucharle y saber que EL está allí, pero no tan lejos de los hombres como para no escucharles, y recordar que ellos, los hombres, también están allí. ¿ Que dónde ? fuera de la puerta, hay miles de ellos, millones. Pero incluso mas importante para mi , un hombre, dos hombres , diez hombres , cuyas manos tengo la intención de acercarlas a la cerradura. Por lo tanto yo estaré allí, cerca de la puerta.
Yo he sido más bien un portero, por lo tanto permanezco apoyado en la puerta
______________________________________________________________
Sam Shoemaker * Tuvo una importancia capital en el inicio de los A.A.
Bill W. escribió esto en el Grapevine en febrero de 1.967, haciendo referencia al hombre que escribió " Stand by the Dor" Permanezco en la puerta
Sam Shoemaker
Febrero de 1967
l Dr. Shoemaker era una de esas personas indispensables para AA. Si él no se hubiera ocupado tanto de nosotros en nuestros primeros días. nuestra Comunidad no existiría hoy. Por lo tanto, su recién publicada biografía, titulada I Stand By the Door [Espero en la puerta], tan bien escrita por su esposa Helen. sirve como un recordatorio conmovedor de la gran deuda que tenemos con él y para enriquecer nuestra comprensión de este magnífico amigo.
Para empezar, permítanme que familiarice a nuestras nuevas generaciones con el "Sam" que Tos ancianos conocimos tan bien en los primeros días de AA y en años posteriores. Con este fin, me gustaría hablar de su presencia en nuestra Convención Internacional de 1955, celebrada en Saint Louis. Cito las siguientes palabras de nuestro libro de historia, AA Llega a su Mayoría de Edad.
"El Dr. Sam aparentaba ser escasamente un día más viejo que cuando lo conocí por primera vez hace veintiún años en su dinámico grupo de la casa parroquial de Calvary en Nueva York. Cuando empezó a hablar nos produjo a los allí reunidos en el Auditorio Kiel el mismo impacto que nos había producido a Luis y a mí años atrás. Como siempre, llamaba al pan, pan y al vino, vino; y su ardiente entusiasmo, su sinceridad y su claridad diáfana servían para reforzar el efecto de su mensaje. A pesar de todo su brío y su elocuencia, Sam nunca perdió su sentido de la medida. Era un hombre que nunca vacilaba en hablar de sus propios pecados. Se presentó como un testigo del poder y del amor de Dios. tal como lo habría hecho cualquier miembro de AA.
"La presencia de Sam ante nosotros era otra evidencia de que la Providencia se había valido de muchos conductos para crear Alcohólicos Anónimos. Y ninguno más vitalmente necesario que el conducto abierto por Sam Shoemaker y su Grupo Oxford de la generación anterior. Los principios de autoexamen, de reconocimiento de los defectos de carácter, de reparaciones por los daños causados y de trabajo con otros, adoptados por la Comunidad en sus días pioneros, nos venían directa y exclusivamente de los Grupos Oxford y de Sam Shoemaker, su líder en Norteamérica en aquel entonces. Siempre aparecerá en nuestros anales como la persona cuyo ejemplo inspirado y cuyas enseñanzas contribuyeron más a crear el clima espiritual en el que los alcohólicos podríamos sobrevivir y luego desarrollarnos. AA tiene una deuda de gratitud eterna por todo lo que Dios nos envió a través de Sam y sus amigos en los días de la infancia de AA."
Creo que cualquiera que lea el libro de Helen Shoemaker, J Stand By the Door, será una mejor persona por haberlo hecho. Este relato vívido y conmovedor de Sam en su vida privada, en su trabajo pastoral, y en su vida pública nos ofrece un amplio y detallado retrato de uno de los mejores seres humanos de nuestro tiempo.
