Hoy les traemos el testimonio de alguien que conoció a Juan XXIII y nos cuenta como admiraba la serenidad y paz con la que afrontaba los problemas más complejos. Y como utilizaba para ello su “decálogo de serenidad”.
Una de las cosas que más me asombraron siempre en él -habla de Juan XXIII- era aquella extraña, casi milagrosa, serenidad que mantenía ante los problemas y ante las tormentas de su vida, que no fueron pocas, aunque él lo disimulase. Yo recuerdo, por ejemplo, aquel día de octubre de 1962 en que pareció que el Concilio Vaticano iba a dividirse en dos, cuando la mayoría de los obispos centroeuropeos y del Tercer Mundo se «cargó» el más importante de los esquemas preparados por la Curia Romana y los prelados más conservadores.
La situación era bastante desconcertante, porque el número de votos contra el esquema superaba la mitad, pero no alcanzaba los dos tercios. Con lo que (como un documento no podía ser aprobado ni derribado más que por más de dos tercios) el texto seguía jurídicamente en pie, aun estando en minoría, pero todos sabíamos que tenía una vida artificial, pues nunca alcanzaría los dos tercios para ser aprobado. Sólo una intervención del Papa modificando el reglamento podía hacer salir del atasco, y era mucho pedirle a Su Santidad Juan XXIII que también él se pusiera contra los autores del texto (sus más íntimos colaboradores, elegidos por él).
Aquella tarde el secretario del Papa llamó por teléfono al colegio Pío Latino para decir que, aunque el Pontífice tenía señalado el día siguiente para ir a inaugurarlo, «como aquella tarde hacía un sol precioso», le apetecía darse un paseo. Y que si podía, de paso, inaugurarlo aquella misma tarde. Así lo hizo.
Yo estuve allí. Y recuerdo que el Papa hizo la homilía más hermosa que jamás le escuché y que, en ella, nos recitó de memoria una preciosa oración a la Virgen que él solía ezar siempre de niño. Estuvo el Papa feliz y no dejó de sonreír ni un solo segundo. Y yo me preguntaba: «Pero, este hombre, ¿qué es?, ¿un frívolo? Con el follón que tiene montado en el Concilio, ¿lo que le preocupa es darse un paseo porque hace un sol precioso y hablar infantilmente de la Virgen María?».
A la mañana siguiente tuvo la respuesta: El Papa creaba una nueva comisión mixta para elaborar un nuevo esquema, y en ella integraba a los conservadores y a los más avanzados, sin humillar a nadie, pero permitiendo al Concilio seguir su camino. Y aquella mañana mi pregunta fue otra: ¿De dónde sacaba el papa Juan XXIII esa asombrosa serenidad que le permitía no perder nunca la calma? Años más tarde, cuando se publicó su Diario del alma, entendimos muchas de las claves de su vida. Y ésta entre otras.
Descubrimos que esa serenidad la sacaba, ante todo, de su alma de santo en contacto con el Sobrenatural, pero también de su inteligente sabiduría humana. Concretamente allí, con ese libro, explicaba el Papa (mucho antes de serio)que él nunca se proponía las cosas a plazo largo, porque la idea de tener que hacer «siempre» una cosa le habría descorazonado, y que, en cambio, era capaz de hacer lo más difícil si se lo proponía sólo por doce horas, pero repitiendo cada día ese propósito.
A esta luz había escrito, de muy joven, este decálogo que yo ofrezco hoy a mis lectores:
1- Sólo por hoy trataré de vivir exclusivamente al día, sin querer resolver los problemas de mi vida todos de una vez.
2- Sólo por hoy tendré el máximo cuidado de mi aspecto: cortés en mis maneras, no criticaré a nadie y no pretenderé criticar o disciplinar a nadie, sino a mí mismo.
3- Sólo por hoy seré feliz en la certeza de que he sido creado para la felicidad, no sólo en el otro mundo, sino en éste también.
4- Sólo por hoy me adaptaré a las circunstancias, sin pretender que las circunstancias se adapten todas a mis deseos..
5- Sólo por hoy dedicaré diez minutos a una buena lectura; recordando que, como el alimento es necesario para la vida del cuerpo, así la buena lectura es necesaria para la vida del alma.
6- Sólo por hoy haré una buena acción y no lo diré a nadie.
7- Sólo por hoy haré por lo menos una cosa que no deseo hacer; y si me sintiera ofendido en mis sentimientos, procuraré que nadie se entere.
8- Sólo por hoy me haré un programa detallado. Quizá no lo cumpliré cabalmente, pero lo redactaré. Y me guardaré de dos calamidades: la prisa y la indecisión.
9- Sólo por hoy creeré firmemente -aunque las circunstancias demuestren lo contrario, que la buena Providencia de Dios se ocupa de mí, como si nadie más existiera en el mundo.
10- Sólo por hoy no tendré temores. De manera particular no tendré miedo de gozar de lo que es bello y de creer en la bondad.

Algo sobre AA llega a su mayoría de edad









W.G.W.
Box 459 Grand Central Annex
New York 17, N. Y.


March 20, 1957
WGW/nw
Mr. and Mrs. James Burwell
4193 Georgia Street
San Diego, california [sic]

Perdona este largo retraso. He estado horriblemente  ocupado con el libro y el proyecto de televisión. Un contrato para este último proyecto, el de de la televisión,   probablemente será firmado pronto. La NBC ha comprado la  historia. Así que supongo que empezaremos a intentar hablar sobre ello   en la pronto.

Mientras tanto he recibido un centenar de respuestas favorables sobre el libro "AA Llega a su Mayoría de Edad". Al igual que la tuya  propia, son extremadamente favorables. Estoy realmente encantado de que ustedes, a la gente, les guste el  libro y pueden ver tan pocos cambios.

Estoy especialmente contento de tener esa primera  revisión de la revista AMA . He saqueado nuestros archivos, pero no lo encontré. Vamos a tratar de poner esto en el apéndice del libro, a condición de que al Dr. Bauer de la AMA le parezca  bien. Y estoy seguro de que lo hará; él es un gran muchacho.


He escuchado de Dorothy y, como a ti, también le gusta mucho el libro. Fue bueno saber que Caroline aprobó la manera en la que Hank fue tratado en el libro-.



       Tienes razón  sobre que 1937 es la fecha que nos separamos de los Grupos Oxford. Alguien más abordó esta cuestión, también.


Yo también voy a poner en el libro un poco sobre Jackie Williams, ya que , a pesar del hecho de que él no lo hizo, él nos hizo mucho bien. También, la Discripcion [sic] de su funeral y la gran Fe que fue sentida por todo el mundo allí. Fue un incidente muy conmovedor que debería ser registrado.

Mientras tanto, tengo que volar. Un millón de gracias a los dos.

  Siempre tuyo,

                                                              /s/ Bill

                                                              Bill





WGW/nw
Mr. and Mrs. James Burwell
4193 Georgia Street
San Diego, california [sic]


Mas de lo mismo







En 1939 estaba ocupado en una revisión crítica de las publicaciones sobre alcoholismo. Entre mis lecturas había algunas verdaderas joyas y una abrumadora cantidad de papeles variando en la mediocridad  y  con franqueza dando vueltas sobre lo mismo.


Un día de ese año, me encontré en mi escritorio un libro con una cubierta de polvo amarillo y rojo. Su título era "Alcohólicos Anónimos".



Con un suspiro me levanté y me dije a mí mismo: "Un poco más de materia   mediocre ." Pero apenas había leído unas páginas cuando me di cuenta que tenía una de las joyas más preciosas delante de mí.



Dr. E. M Jellinek



Fuente : Revista Grapevine 1.989


AMANTES DE LA HISTORIA DE ALCOHOLICOS ANONIMOS  ( AHAA ) ES LA MAYOR WEB  SOBRE LA HISTORIA DE ALCOHOLICOS ANONIMOS EN ESPAÑOL  AHAA NO ESTA...